Una inmersión planetaria provocada por el Sol podría devorar a todos los planetas del Sistema Solar
Así como todo ser vivo en el universo, las estrellas tienen su ciclo de vida y en algún momento tienen que morir. La diferencia está en las formas y en las consecuencias. , según la NASA.
Cuando una estrella va a morir, se expande hasta convertirse en una gigante roja. Ese proceso de conversión, de acuerdo con el informe del sitio web de Nat Geo, puede tardar millones de años, y en el proceso, acaba con todo lo que esté a su paso para recuperar energía.
Becky Ferreira, periodista de ciencia de The New York Times, la inmersión planetaria implica que las estrellas devoran a sus propios planetas en su lecho de muerte.
“Lo más probable es que éste sea el final de nuestro propio Sistema Solar y con él, de la Tierra misma”, añadió.
La Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) explica que la mayoría de las estrellas tardarán millones de años en morir, incluyendo el Sol.
“Cuando una estrella como el Sol ha consumido todo su combustible de hidrógeno, se expande convirtiéndose en una gigante roja. Puede tener millones de kilómetros de diámetro, siendo lo suficientemente grande como engullir Mercurio y Venus”, detalla la ESA.